Elemental Bistro

Hago esta reseña en mi segunda vez en Elemental. La primera vez fue una casualidad maravillosa y de ahí que volviéramos de nuevo. Hemos llegado en hora punta y con el salón lleno , pero se igual modo se nos ha tratado genial y tras media hora hemos conseguido mesa, en esta ocasión en el salón de la playa baja. La experiencia gastronómica ha sido de nuevo maravillosa, platos elaborados con gusto y con un sabor que te transporta a Paris a cada bocado. El trato del que creo que es el dueño es maravilloso. Uno de los camareros no tanto, algo despistado , y aunque muy cortés, poco proactivo... ( trajo el entrante sin haber traído tenedores, servilletas o platos , así como la bebida) , pero puede que fuera nuevo, y por ello, todo el mundo merece una oportunidad . Lo recomiendo, y seguro volveremos!

La experiencia fue muy muy muy buena. El chico que nos atendió, fue muy amable y muy atento desde el principio. Nos dio unas muy buenas recomendaciones y estuvo pendiente de todo hasta el final. Toda la comida estaba muy buena, mi plato principal, la hamburguesa, es una maravilla! Hacía tiempo que no probaba una hamburguesa distinta, todo un acierto. He puesto 4 estrellas porque tardaron bastante en servirnos los platos principales, porque estaban hasta arriba, aunque el chico, siendo consciente de la situación nos pidió disculpas y lo solucionó rápido. Volveré sin duda para sumarle la estrella que falta en mi valoración!

En sitio súper agradable, acogedor y con mucho encanto. El restaurante es pequeño pero el trato de los camareros y sobre todo, la calidad y variedad de sus platos le hacen ser un sitio donde volver. Precio asequible. Le pondría un 9,9 por aquello de no dar un 10 y así siempre habrá algo por lo que superarse.

Ayer estuve cenando. El restaurante es acogedor. La atención exquisita. Estaba todo muy limpio. Considerado un restaurante de autor, tiene una carta de platos reducida, preparados minuciosamente (tomamos croquetas, y de segundo bacalao y lomo de vaca; acompañado de un vino francés) y las cartas de vinos son novedosas, por la presentación y por la variedad (vinos franceses y españoles). Los emplatos excelentes. Lo peor, el lomo de vaca tenía un nervios y al comerla se hacía bola en la boca.

Elemental es un lugar acogedor en Malasaña que nos trae un rincón de París al pleno centro de Madrid, y eso, para quienes nos hemos enamorado de la capital francesa siempre es de agradecer. La decoración es elegante a la par que sorprendente, ya que a medida que te fijas descubres mil y un detalles: una antigua máquina de escribir, frases en los espejos, percheros de madera, decoración con velas, toques fotográficos (acentuados con sus cartas, como las de bebida, super originales e increíbles siendo carretes caracterizado cada uno con su pegatina)... Aunque es el restaurante perfecto para una quedada en petit comité con amigos, o un lugar ideal para una cita romántica, mi familia decidió hacer una comida allí hace un par de semanas, no es que seamos demasiados, peor nos juntamos 15: nos sirvieron uno de los menús especiales de Navidad y qué decir, no quedó nada en el plato. Hasta mis abuelos que no salen de los platos tradicionales típicos salieron encantados. Fue todo un gusto disfrutar de este rincón gastronómico. Sin duda habrá que volver, además, de que lleves a quien lleves allí vas a quedar bien. Enhorabuena a Sergio (el jefe de sala) y a todo el equipo!