Restaurante La Perfumería

Luminoso y tranquilo restaurante en el centro de la ciudad, las mesas están cerca, pero nadie se molesta. Muy sonriente, personal agradable. Deliciosa, fresca, comida sencilla. Excelente vino y cava de Requeña. El menú degustación es delicioso y pensado. Le gustó mucho el lugar, también hay una hermosa terraza en la parte superior y un bar.

Menú degustación. Exquisita atención del personal, cantidad más que suficiente, sabor estupendo, el steak tartar ahumado delicioso. El sumiller nos explico y recomendó un vino acorde a nuestras preferencias que resultó super agradable durante toda la degustación. Ambiente muy acogedor, decoración estupenda. Precio correcto, para repetir.

Con un amigo que tambien le encanta la gastronomía, buscando sitios nuevos o sin probar por nosotros, fuimos al restaurante La Perfumería. El entorno espectacular, un edificio reformado para ser un hotel de lujo. El restaurante cómodo, el servicio perfecto....y la comida nos encantó Una grata sorpresa. Una Ensalada de verduras de temporada con escabeche de mandarina y queso Idiazábal para empezar, seguido de los que más sorprendió, Bogavante a la brasa sobre tuétano de ternera, con una de dacsa para hacer un taco. Y como principales el cordero, muy bueno, y los cappelleti. Los postres la nivel....con unos vinos dulces espectaculares. Un sitio muy recomendable.

Después de pasar una noche magnífica con mi pareja en el hotel que se encuentra arriba, desayunamos en La Perfumería. La verdad que la atención, igual que en el hotel, fue magnífica, como debe ser en un local de estas características. El restaurante está muy bien decorado, es muy privado y el servicio del desayuno fue muy rápido. De la comida, decir que estaba todo riquísimo, de hecho volveremos otro día para cenar y probar la carta, que tiene muy buena pinta.

Restaurante situado en el hotel Palacio Vallier. Extensa carta donde abundan productos de alta gastronomía como las ostras, caviar, … junto con buenas carnes y pescados. Relación calidad/precio€€€€. Raciones pequeñas. Atención y servicio esmerado. Si tenéis oportunidad, las vistas desde su terraza son de lo mejor de Valencia. Un privilegio.