Garraxi Taberna

Sitio súper recomendable. Es la segunda vez que voy porque vivo en Zaragoza, si no, acudiría con asiduidad. La comida es muy rica, las hamburguesas de remolacha son las mejores que he probado nunca (y he probado muchas). Toda la carta es deliciosa y el menú del día vale mucho la pena. El personal es eficiente y muy agradable, especialmente su camarera Yubi que nos atendió genial e incluso nos recomendó sitios interesantes. Volveré siempre que vaya a Donosti

El martes 15 de agosto mi amiga y yo comimos en la Taberna Garraxi y salimos contentísimas. El plato combinado estaba ESPECTACULAR y el trato fue estupendo. Además, el precio nos pareció muy bueno por todo lo que comimos. Desde aquí quiero felicitarles por el trabajazo que se observa que hacen (estan a tope y no paran de moverse de aquí para allá, no paran ni un minuto). Y sobre todo me gustaría agradecer a la persona que nos atendió tanto a la llegada, durante la comida y a la hora de pagar (una mujer muy simpática con gafas que nos llamana “maitia” 😊, nos preguntó de dónde éramos y estuvimos hablando un rato). Desde Barcelona hablaremos muy bien de esta taberna y la recomendaremos. Y cuando volvamos, no dudaremos en volver a visitaros. Eskerrik asko, gràcies. Agur y Go Vegan!!!! 🤘

La comida estaba buenísima. El gazpacho de tomate y sandía es una muy buena elección, sobre todo para verano. La ensalada estaba también muy buena, el queso feta le daba un toque perfecto, así como las pipas. El risoto de setas y pesto también es un plato recomendable, la cantidad era bastante abundante. No le doy 5estrellas porque el servicio fue algo lento (para ser un menú del día). Esperamos volver con menos gente. Precio del menú: 15€. También sirven medios menús.

Aterrizamos en San Sebastián y nuestra amiga nos lleva a un vegetariano, sorprendente como poco. No es para nada lo que teníamos en mente, pero me apeteció ya que nunca había estado en ninguno, ¡mente abierta! El local es peculiar, pero nos gustó mucho. Acabamos muy llenos, y todo estaba sabroso y bien preparado, salmorejo, verduritas con queso, tofo empanado con salsa de hongos y tarta de manzana. Un placer haber ido, probado y disfrutado.

Restaurante que te hace sentir como en casa tanto por su comida como por el ambiente. Lo diferente de este lugar es que los cubiertos, el pan, servilletas y alguna cosa más te sirves tu y cuando se te acaba el agua vas tú a coger otra jarra de agua. Respecto a la comida esta rica. Tenía pinta de comida casera, es verdad que no pierden el tiempo en decorar el plato, pero eso no hace que esté mejor o peor. Sin duda volvería, aunque los baños no son muy accesibles y no tienen para pagar con tarjeta.