Restaurante Pintabocas

Una experiencia buena, mejor de lo esperado. Comimos de entrantes y quedamos satisfechos por la posibilidad de comer de todo un poco. Un amigo vegetariano pudo disfrutar también de la cena, lo que es de agradecer en las cartas de los restaurantes. El ambiente era magnífico, las chicas que nos atendieron muy simpáticas y atentas en todo momento. Y decir que para ir de tapeo no nos salió muy caro, y con dos botellas en la cuenta. Muy bien todo, no puedo quejarme de nada y está claro que se volverá, el único pego que pongo, que aunque a pesar de que nuestro amigo vegetariano ceno bien, no tiene opciones vegetarianas en los principales por lo que le resta opciones. A pesar de ésta puntualización, lo recomiendo, no es un estrella michelín pero lo hacen muy bien y está claro que volveremos, repetiremos porque fue muy grata la experiencia.

Muy buena relación calidad-precio. Platos bien elaborados tanto en su menú del día, como en carta. Lástima de la falta de empatía con el cliente: Ante una simple reclamación sobre un chupito de orujo en "dudoso" estado, la respuesta estuvo fuera de contexto y eso después de tres días seguidos de acudir a comer cuatro personas. En el detalle está la excelencia, tomen nota. Gracias

Espectacular! A parte del buen servicio la comida estaba exquisita. Variedad y sabores de primera calidad fáciles de diferenciar cada uno y ninguno pasaba desapercibido. Timbales, croquetas de 3 sabores, ensalada original de rollitos de primavera, pasta, rissoto, y postre de 3 chocolates suave y delicioso. Muy bien

Cuando encuentras lugares como éste, realmente me agrada y me llena de satisfacción. Local muy bien diseñado y distribuido. Servicio eficaz, amable y servicial a más no poder. Y , finalmente, la comida espectacular, a una relación calidad precio muy buena. Entre semana, menú del día o carta. Fin de semana, sólo carta , pero a un buen precio. Fuimos un grupo de 5 adultos y 2 niños, y comimos todos estupendamente. Los niños, un buen plato de spaghettis con tomate (5'50€). Los adultos, comimos unos entrantes: ensalada de ventresca , muy rica y sabrosa, a la par que abundante , seguidamente unos langostinos rebozados con salsa de mostaza agridulce, y unas puntillitas de calamarcitos con salsa. De segundos, unas hamburguesas: la Basque Label, la Sweet y otra, todas ellas exquisitas en sabor como en cantidad. Rematamos con una selección de postres para compartir: la torrija , el sorbete de mango y el bizcocho con tres chocolates. Todo esto acompañado de una botella de Ramón Bilbao Crianza, una botella de agua mineral y una Coca Cola. Salimos a unos 34€ por persona. Un previo más que justo, para la cantidad y calidad de la comida consumida y disfrutada. Para recomendar muy mucho. Habrá que repetir y probar algunos platos que se nos quedaron en el tintero....