Foster's Hollywood

En este Fosters Hollywood está uno de los mejores camareros que he visto nunca en cualquier restaurante. El servicio en mesa es espectacular, en todo momento están pendientes de que todo este a la orden y todo el mundo tenga su bebida. Se fija en todo momento en las mesas. La comida es excelente, con buena elaboración y al puro estilo fosters hollywood. El personal es simpático y educado

Súper buena la comida y hay muchas opciones para vegetarianos 🥦 Pedimos unos 1/2 denachos entrante con la carne a parte súper buenos sinceramente La hamburgesa vegetariana estaba bastante bien, para mi gusto le falta un toque de queso más porque la carne vegetariana de por sí es muy seca, Y el costillar según mi novio súper bueno se pidió la salsa bbc a parte porque se pasan echando y esa salsa es muy dulce y empalagosa entonces todo perfecto la comida 60euros

Me gusta la comida y el servicio es bueno pero los postres son súper caros, los del Seventy 5 son más baratos y más buenos, lo bueno esque la Pepsi es ilimitada. Edito después de 4 años de mi primera reseña, actualmente en palma de mallorca es el único Foster's que sigue teniendo buen servicio y buena comida , en el de porto pi , el del fan y el del festival park es un desastre. Así que este es el único Foster's que recomiendo a día de hoy.

El local tras la reforma es mucho más acogedor y con más vida. La comida es de calidad y cantidad, el precio es correcto respecto a lo que uno come ya que es calidad y cantidad. Las nuevas hamburguesas están muy bien, hay 2 o 2 que dependen un poco más del paladar de cada uno. El menú para niños completo y copioso, además de que te dan juegos para los niños y un regalo para casa. Además con la App conforme más vas, más descuentos tienes aunque suelen ser en importes mínimos de unos 40€.

Foster’s Hollywood es un restaurante que destaca especialmente por las hamburguesas y los postres. De hecho, el brownie es el mejor que he probado. El punto negativo es que los precios han subido. Por esto, realmente merece más la pena ir los mediodías entre semana para aprovechar el menú. Los camareros son amables y el espacio tiene un decorado particular. La ubicación es perfecta porque se encuentra en el Ocimax y hay un parking subterráneo ideal para dejar el coche.