Sala

Maravilloso Manuel y maravillosa su cocina. Platos ingeniosos, elaborados y sabrosos, he ido en un par de ocasiones y no hay nada que no me haya encantado. Además, tiene en cuenta si hay algo del menú que no toleres o que no te guste, y si está en su mano te lo adapta. Entorno acogedor donde te hace sentir, como él dice, en la casa de un amigo.

Descubrí este local gracias a Google, y menuda sorpresa. Ninguna reseña engaña, y todo lo que se diga es poco. El muchacho es súper atento y simpático con la gente que acude a su casa, y la comida que hace está llena de sabor y contrastes geniales, además de color. No te quedas con hambre, la relación calidad/precio muy acertada y el ambiente es tranquilo y acogedor. La idea del restaurante de elaborar un menú cerrado distinto cada semana del año también me parece un acierto. La localización, en pleno centro de la ciudad, fantástica. Sólo me queda decir que tenéis que visitarlo (redervad con antelación para asegurar sitio, y llevar a vuestra familia no humana que también es bienvenida) y felicitar al creador de este espacio y desearle éxito. 🍀✨💛

Comida excelente y cuidada, usando diferentes sabores q generan emociones y en un ambiente con un trato excelente del chef/dueño que trata con respeto y cercanía, un hilo musical muy agradable, y en un espacio que, aunque recogido, da la sensación de amplitud. Además, de precio muy bien, y más con la calidad de los ingredientes y el tiempo dedicado a la elaboración. El concepto del lugar merece la pena ser visitado y repetir

Una verdadera delicia. Si de verdad quieres algo DIFERENTE, tienes que visitar este local. La sala es diáfana y puedes ver cómo preparan las comidas. Manuel te atiende con todo el cariño y esmero que se merece este espacio. Un lugar único en el que el creador de cada plato te explica sus ingredientes. Ensaladas espectaculares, muy sabrosas y creativas. Deja que te sorprendan y no te arrepentirás.

Muy buena experiencia. El local es pequeño pero se está a gusto. Tomamos un menú semanal compuesto por una crema con guisantes y brandy exquisita de primero, de segundo tosta rústicas muy rica y de tercero risotto de quinoa magnífico. Personal muy atento, explicando todas las características e ingredientes de los platos. Compañía de lujo. Muy recomendable!!!

Si os gusta la comida sana y vegetariana este es el lugar ideal.El local no es grande, justo si buscas tranquilidad e intimidad.Cocina abierta donde ves trabajar Manuel.Que por otro lado es un excelente anfitrión que te explica detalladamente lo que vamos a comer.Curiosidad, disponen de menús semanales variados y distintos para chuparse los dedos. Os dejo fotitos de los platos. Totalmente recomendado a amantes de la comida sana y vegetariana. No destaca por su decoración ya que lo importante es lo que comemos. Íntimo y relajado