Maria Lisboa Brunch

Lugar pequeño, acogedor, encantador. Una comida de nivelazo, un precio excelente (teniendo en cuenta la abundancia y calidad de comida, la calidad del servicio, la ubicación del sitio). Fuimos 2 comensales y gastamos 61 €. Pidiendo 2 croquetas de entrante cada uno, un principal cada uno (uno de ellos francesinha), 2 copas de vino (muy buen vino), 3 postres (de verdad, a cual más rico y porciones más que generosas) y 4 pasteles de nata para llevar (para el dia siguiente, estaban ESPECTACULARES). Lo recomiendo muy mucho, de verdad. Volveremos!

¡Súper recomendado! Desde que llegas ya te sientes bienvenida. Un trato excelente y respetuoso. Asegurándose siempre de que disfrutes no solo de la comida sino de tu tiempo en María Lisboa. La comida es sabrosísima. Se nota el mimo en la preparación de los platos y también que es comida portuguesa preparada por su propia gente. Consigue eso que deben conseguir los restaurantes que exportan gastronomía, llevarte por un rato a las calles de su lugar de origen. Ayer noche desde Málaga, conseguimos viajar por un rato a las calles de Oporto con esta Francesinha ❤️

En un callejón de Málaga muy típico se encuentra este restaurante de comida portuguesa. La acogida profesional y cariñosa de su dueña, la decoración y esos platos típicos, generosos y auténticos son una maravilla. Parece que estamos invitados en su casa, fuera de la movilidad turística. Mejor reservar que el sitio es pequeño y muy concurrido. Si queréis disfrutar de un viaje gastronómico a Portugal, aquí esta vuestro sitio.

Me encantó la comida en este bonito restaurante. María nos trato de forma fantástica, con una sonrisa, muy familiar y nos ayudó en nuestra elección. Hacia calor dentro, comimos en la terraza pero estuvo atenta a nosotros en todo momento. Pocos clientes locales. Los pasteles de Belem impresionantes, la vajilla preciosa. Volveremos

Local pequeñito y con mucho encanto donde poder disfrutar de platos típicos del país vecino. El servicio fue muy atento y agradable. Lo que más me gustó, fue la 🥪francesinha con huevo y el 🍰 postre rulo de naranja. Recomiendo reservar en el interior (poquitas mesas), ya que está situado en un callejón un poco estrecho y cerca de bares de copas, por lo que es un poco incómodo comer en la calle.