Parrilla Caminito

Mi mejor restaurante de carnes a la brasa de la ciudad. Muy buena calidad en la materia prima y una buena atención tanto por los empleados como por el dueño ; por eso siempre que puedo regreso a probar su variedad de carnes ,postres, etc teniendo esta última vez una tarta de queso al horno de 10 ; exquisita.100% Calidad.

Una experiencia FANTÁSTICA!! Fuimos a comer 6 personas en el día de San Froilán , en el cual a menudo te atienden mal en los demás restaurantes. En cambio, este es una excepción, ya que comimos genial , en abundancia y nos atendieron de manera agradable . Es un sitio muy bien coordinado y el encargado hizo que nuestra experiencia fuese aún mejor , ya que se comportó fenomenalmente con nosotros y cuando se produjo una equivocación con un plato , nos lo retiró y nos trajo el plato correspondiente sin problema y con rapidez. Lo que no sabíamos es que al pagar la cuenta nos encontraríamos que el encargado nos había invitado al plato comentado anteriormente. Los postres están buenísimos. Como dije anteriormente , una experiencia maravillosa y con ganas de repetir!!

El restaurante tiene una decoración cuca y la disposición de las mesas está adecuada al espacio disponible. La carne es de buena calidad, las arepas están muy logradas y los postres son bastante ricos (no aptos para quien no es goloso:) El servicio es atento y rápido. Para ir un grupo está bien. Es un local bastante ruidoso, por lo menos en fin de semana. Aconsejo reservar. Recomendable!

Casi dos años intentando ir, pero mereció la pena la espera. Reservamos un par de días antes de ir. Nada más llegar nos acomodaron en nuestro sitio. Eramos tres, pero aún así no nos pusieron pegas para pedir el menú de grupos. Pedimos la opción de 50 euros y así empezó nuestro camino Para empezar una cecina ahumada de León. Tengo que reconocer que no soy un gran fan de la cecina, pero en este caso me encantó. El toque ahumado destacaba con matices de roble en el primer impacto, siguiendo con un toque ligeramente salado y el sabor curado característica de la cecina, para terminar con un retrogusto que lindaba lo dulce y ahumado. Continuamos con la tortilla de Paula, una tortilla estilo Betanzos con un toque salado que quedaba increíble. La tortilla tenía la consistencia perfecta de restaurante (interior algo líquido, capa externa lo suficientemente firme para que se pueda cortar y repartir sin que se deshaga) y aunque yo en mi casa la prefiera incluso menos hecha, comprendo que es la opción ideal para la hostelería. El último entrante eran unas croquetas de jamón, con una bechamel cremosa y perfectamente hechas. Las croquetas tenían el tamaño perfecto para comerlas de un bocado y literalmente creaban una explosión de textura y sabor en la boca (cuidado con las quemaduras) A partir de aquí empezó a llegar los platos principales. El secreto ibérico estaba espectacular, jugoso, tierno y con un gran sabor. El churrasco de vaca estaba en su punto de cocción, con un sabor fuerte a vacuno y la cantidad exacta de grasa. Quizás el plato que menos nos gustó es el criollo, que tenía una calidad normal, pero que palidecía al lado del resto de cortes. La entraña y la picaña fueron las estrellas del show. Tiernas, melosas, con un sabor refinado a ternera y con el punto exacto de sal. Por último, llegó el chuletón estilo Tomahawk. Aunque los tres estabamos al límite de nuestras fuerzas, su sabor era tan intenso y estaba tan bien cocinado que solo quedó una de las puntas. Los platos principales estaban acompañados de acompañamiento abundante de patatas fritas y ensalada, además de unos pimientos rojos asados que eran una delicia. El único del grupo capaz de tomar postre fui yo y, supongo que por ser mi cumpleaños, me permitieron escoger cualquier postre de la carta. Elegí la tarta de queso con la idea de probarla sólo (soy fanático de las tartas de queso). He de decir que terminé acabándomela pese a estar totalmente lleno, así de buena estaba. Para rematar, tomamos unos chupitos cortesía de la carta. Todo este banquete por cuanto? Pues 50 euros por cabeza. Si me lo permitís, una ganga para la atención, calidad y cantidad de comida.

Todo perfecto. Comida, atención, presentación, el local. Te aconsejan perfectamente sobre que pedir, cantidades etc. La carne de ternera está espectacular, y las empanadillas criollas de ternera gallega, un 10. Recomendable 100%. Fuimos 7, comimos bien, bebida, entrantes, carne en abundancia, postres y cafés, 32,50€ por cabeza.

Muy buenas sugerencias en los platos, su personal es muy atento y amable. Probamos de entrada dos Empanadas de carne y provoleta (deberían servirla con la cazuela así se evita que se enfríe tan rápido :) ). De plato principal seguimos la sugerencia de probar la Picanha (muy acertada la sugerencia estaba divina) y media de entraña, muy rico pero para pensar como evitar que los platos se enfríen tan rápido, de postre probamos la tarta de queso muy rica!!