Terraza De Vivi

Preciosa terraza con unas vistas increíbles a Barcelona, aunque, lo mejor es el personal. Laura, Gabrielle y todos sus compañeros de fuera y dentro de la barra son súper agradables, encantadores y muy profesionales. Nosotros somos vecinos del barrio y nos hemos sentido como en casa, sin duda volveremos!

La ubicación de la terraza es fantástica. Junto al Mercado de Santa Caterina, ofrece vistas a la Catedral, a Santa María del Mar, el Hotel Vela ... Los camareros fueron atentos y amables, y sus recomendaciones fueron un gran acierto. La música, nada intrusiva, acompañaba la velada. El único pero, dos parejas de americanos que conversaban a voz en grito en la barra. Durante gran parte de la cena, sólo se les escuchaba a ellos. Sin eso, la cena hubiera sido perfecta.

Pase por aquí por una recomendación de Instagram y fue todo muy agradable, desde la entrada hasta el momento de sentarnos, lugar acogedor, con unas vistas y atardecer de lo más bonito. Variedad de bebidas con alcohol (Whisky, Ron, Mezcal… ).Los cócteles a partir de 14€ y la cerveza 7€. Para cenar hay que pedir reserva. Me gusto el lugar. Volveré.

Bueno en primer lugar había mirado bastantes reseñas para hacerme una idea, desde mi punto de vista puedo confirmar que los precios son algo elevados pero una vez he comprobado la calidad de lo que ofrecen puedo decir que el precio está a la altura y sí lo merece. Me dieron una mesa algo apartada al principio, pude cambiar a una con vistas y la experiencia fue mucho mejor, pedí un cóctel de hawaian sour, y estubo tan bueno que decidí pedir más, el sabor era exquisito y no tenía un 90% de hielo como en otros lugares sino lo justo. También pedí unas bravas, estaban bastante bien de cantidad (3 pax) pero sí se debe mejorar la salsa, era algo básica, sin sabor. Por el resto me ha gustado mucho el trato de los camareros, la experiencia en general y la calidad de la bebida. Lo puedo recomendar sin duda para ir y volver más veces.

Esta en el Gótico, en la azotea del hotel. Las vistas son espectaculares, y la decoración muy exótica, con plantas, etc.. Mejor reservar. Me confundí de día al hacer la reserva y la encargada muy amable nos busco otra mesa a pesar de que estaba completo. La chica de la barra me preparo un cocktail espectacular. La atención del personal súper amable. La comida no tiene mucha variedad y no es nada del otro mundo, pero súper recomendable para hacer un parón. Con el calor que hacía arriba apenas se notaba con la brisa. Volveremos seguro!