Pipistrello Ristorante

Un gran descubrimiento! De los mejores restaurantes italianos de Valladolid. El dueño te explica la calidad y los productos con los que trabajan, y eso se nota en los platos, son exquisitos. Y si dejais hueco para el postre...la tarta de queso y el cremoso de galleta son espectaculares. Y el trato al cliente genial. Totalmente recomendable!!

Pipistrello (Murciélago en castellano) sirve auténticas pizzas italianas con masa elaborada en el local. Buena textura y ricas de sabor aunque en mi opinión un poco escasas de algun ingrediente (vegetales sobre todo, que son materias primas baratas). Hay una pizza que si junto todos los trocitos no llega a 1 aceituna negra. Comedor coqueto dispuesto aparte de la zona de barra, ideal para arrancar la velada con un vino y un ligero aperitivo. El servicio fue excelente. Rápido y muy cordial. De 10.

Hemos comido un grupo de 14 personas. Al ser tantos, hemos probado varios platos de la carta y a todos nos ha gustado mucho. Entrantes, pizzas, pasta, ensaladas, todo de 10. Mención a parte los postres. Increíbles. La camarera que nos ha atendido muy amable. Igual que el dueño que también ha estado pendiente. No sólo volveremos si no que lo recomendaremos. Nos pidieron una “fianza” para reservar, es verdad que es la primera vez que me ocurre, pero me parece bien. Es increíble que la gente reserve y después no se presente.

Puede que hayas ido a muchos italianos pero ninguno con una cocina tan auténtica. 100% recomendable. Te hablan de su producto con orgüllo y cariño, garantía de que lo que te comes merece la pena. Probé una cerveza italiana muy buena, fuimos 5 amigos y pedimos variado para probar tanto entrantes (ensalada de pollo y provolone), como pasta (al pesto y carbonara), así como pizza (fruti di mare) y los postres… todo buenísisimo.

A destacar de este restaurante italiano la excelente atención que nos dio el camarero, aconsejándonos que pedir, y pendiente en todo momento de lo que necesitáramos, con una amabilidad y educación exquisitas. La comida, tanto la pasta, como las pizzas que pedimos, estaban muy ricas. La única pega que puedo ponerle es que si cenas en la terraza, las mesas se quedan pequeñas por el tamaño grande de los platos de pizza, y se hace un poco incómodo. Muy recomendable, para repetir!