Topa Sukaldería

Un lugar recomendado por alguien de la zona, Topa Sukaldería es un excelente lugar para una comida informal en el centro de Donosti. La comida, parcialmente recomienda por el camarero, es más mexicana que vasca en su 'fusión', pero muy buena de cualquier manera. Para dos personas pudimos 4 platos (2 entrantes, 2 principales) y un postre. El guacamole (que prepara uno mismo en la mesa), quesadillas de topa y papada, tacotalos Al pastor y mole de 3000 días. Todo de excelente calidad. Aunque el servicio fue rápido y atento, lo que falla a este local es el ambiente, que situado entre restaurante moderno y formal y bar de copas, no llega a ser ninguno. La música estaba alta cuando llegamos, pero aún más cuando salimos del sitio.

Genial es quedarse corto, la comida estaba exquisita, sobre todo por la recomendaciones, que fueron acertadísimas. Fuimos 9 a cenar y casi casi probamos de todo. El ambiente dl sitio es muy guay, tiene pequeños detalles que son guays, como las botellas de agua que las pintan los propios camareros, un muro pintado que mola mucho

Pide una Chelada y un guacamole para empezar a disfrutar de la mejor comida mejicana de Donosti. Los tacos, el pollo, todo está riquísimo y al punto. Las alcachofas se sirven en una cabeza de cerámica. El guacamole se prepara en un impresionante mortero de roca volcánica porosa. Un sitio para volver periódicamente y que nunca defrauda.

Donosti es una fuente inagotable de nuevas experiencias, de fusiones y de nuevas creaciones. El equipo de Topa Sukalderia, liderado por Ana, se desvive por atenderte y ayudare a entender los platos, compartiendo con todo lujo de detalles, desde las recetas a los cocktailes. De los platos me quedo con los esparragos hechos a baja temperatura y brasa y los boquerones con crema de guindillas y aceitunas. Y el Guacamole hecho fresco en el momento, con instrucciones se merece repetir. Los cocktailes bien se merecen una cata. Una de las sorpresas que esconde Gros. Volveré.