La Finca

Excelente elección para satisfacer el apetito. Los platos son generosos, la variedad de carnes es deliciosa. El servicio fue atento, nos aconsejaron adecuadamente para evitar pedir en exceso. Destaco el carpaccio de ternera, una experiencia imperdible. Aunque disfrutamos de los platos, la cantidad de sal en el lomo de vaca fue un pequeño inconveniente. La torrija asada al final fue un placer culinario. Buena ubicación, lugar encantador y cercano a un estacionamiento subterráneo que facilita el acceso.

La comida exquisita realmente volvería por la comida, pero nos echaron de la mesa sin preguntar si quiera si querríamos postre. Es cierto que nos avisaron que teníamos que marchar a una hora pero no se acercaron antes ni a preguntar qué tal íbamos ni si queríamos postre, sino que sin previo aviso nos encontramos con la cuenta. Le reclamamos al camarero que queríamos postre y nos dijo que ya imposible que nos habíamos pasado de la hora, algo que se podrían haber molestado de preguntarnos antes

Fuimos a cenar hamburguesa y al final acabamos pidiendo fabada además de las burguers. El servicio es rapido porque hay dos turnos de comida, desde las 9 hasta las 11 y a partir de las 11. Nosotros fuimos al primero y comimos rapido, aunque no excesivamente, y muy bien. El unico plato que no nos gustó fueron los finger de pollo que les pedimos a los niños, que venían bastante poco hechos.

Se encuentra en la típica calle de las sidrerías. Local bonito ambientado estilo rústico. Recomiendo reservar antes de ir por si acaso aunque nosotros tuvimos suerte y nos dieron mesa sin reservar. Tienen mucha variedad de productos asturianos y la sidra la escancian los camareros por lo que están siempre atentos y pendientes. La comida rica, el cachopo quizá esperábamos más ya que el queso es demasiado mantecoso y fundido, por lo que le quita mucho sabor y empalaga un poco. Recomiendo los chipirones, la combinación de la tinta y el allioli de 10.

Hemos probado el cachopo de este agrobar y aunque no esta rebozado tengo que reconocer que me ha gustado bastante. Si quieres probar un cachopo diferente, este bar es una excelente opción. La tabla de quesos me ha encantado, los quesos son mas suaves que en otros bares de la zona pero estan muy ricos. Buen servicio, bonita decoración y bien refrigerado el comedor. Lugar muy recomendable.

Mi experiencia en el restaurante fue simplemente excepcional. Desde el momento en que entré, supe que había tomado una excelente decisión. Cada bocado fue un auténtico placer para mis sentidos. La fabada que probé fue sin duda una de las mejores que he tenido el privilegio de disfrutar, y la tarta de queso merece un sincero aplauso con una calificación perfecta. Cada plato que llegó a nuestra mesa irradiaba calidad en cada ingrediente, una verdadera muestra de su compromiso con la excelencia culinaria. La atención al detalle no pasó desapercibida: al ser tres comensales, el equipo tuvo la amabilidad de proporcionarnos cubiertos y platos adicionales para compartir sin problema alguno. Sin lugar a dudas, este lugar se ha convertido en un destino obligado para futuras ocasiones. Mi gratitud y ansias de regresar están garantizadas.

Fuimos nuestro primer día en Oviedo y nos gustó tanto que repetimos. La comida simplemente espectacular, el servicio a la altura y precios en la media de Oviedo. Especialmente destacar el servicio proporcionado por Chema, que incluso escancio sidra con nuestra hija. Además, se puede reservar, un plus en la calle gascona.