Bar Pegaso

Llegamos un lunes a las 15:00. Nos prepararon una mesa, para tres, en la terraza nada más llegar. Nos atendió Alberto. Una gran persona y un gran profesional. Disfruté mucho de una comida casera (menestra de verduras salteadas y pavo estofado) estaba todo delicioso e incluso me preguntaron si quería repetir de pavo estofado. Para mí un 10!

Siempre que viajo a Teruel es parada obligatoria comer un día aquí de menú. La terraza es muy amplia, como una placita, muy lindo el sitio. Una vez dentro, me encanta que conforme entras tienes unas dos mesas y la barra, y en otra parte, el saloncito ( es pequeño, de ahí el diminutivo ☺️), y si vas en invierno agradeces el calorcito y la cerveza en copa helada, créeme. De la comida sólo puedo decir que todo está riquísimo, el dueño es quién te atiende y es muy agradable y atento. La última vez había una mesa grande de comida de empresa y pude oír lo mucho que les gustaba comer ahí; así que si "parroquianos" que comen ahí de normal deciden hacer la comida de navidad... será por algo!! Sólo es cruzar el puente y lo tenéis. Hay más vida,bares y rica comida más allá del centro de cualquier ciudad 💗

Estábamos viendo a un familiar en el hospital y nos lo recomendaron pese a estar más lejos que otros bares. Sin duda fue un acierto. La carta es muy extensa y todo muy casero. Se nota que a la gente le gusta ya que tuvimos que esperar para tener sitio. Raciones muy grandes y servicio muy simpático pese a todo el ajetreo que tienen.