Cafetería Bagare

Fuimos para desayunar después de dar una vuelta por la zona y no ver nada que nos convenciese para desayunar una tostada y un café. Pedimos dentro 3 desayunos porque no hay servicio de terraza (lo tienes que sacar tú mismo) pero la camarera fue muy amable y vino a limpiar la mesa de un café que había de un anterior cliente y nos trajo los desayunos. La tostada era grande y el pan super tierno y crujiente. Además tenían mermelada que no fuese de melocotón y lo agradezco, ya que soy alérgica y es algo que en muchos sitios me cuesta encontrar.

Existe un tipo de sitio para mi gusto en el mundo de la restauración y es aquel al que vas y su producto siempre sabe igual. Un valor seguro. Con las tortillas de este sitio pasa eso vayas a las 10 de la mañana que están recién hechas o a las 9 de la noche (recién sacadas son auténtico pecado). Siempre ese sabor rico y natural en una terraza agradable.