El Balneario

La comida estuvo muy bien y el servicio estupendo, pero la encargada de tomar nota de la comida estaba totalmente desbordada y agobiada y tardó demasiado en atendernos. Además, éramos dos parejas y pedimos tres platos por pareja para compartir y así se lo dijimos a esta persona, pero trajo un plato de una pareja y los tres platos de la otra, de manera que una había terminado de comer y la otra apenas había empezado, teniendo que reclamarle varias veces que los trajera. Por lo demás un lugar con unas vistas maravillosas de la bahía y de la ciudad, con el mar a escasos 5 metros.

El Balneario a los Baños del Carmen me lo recomendara como una sitio icónico para tomar vino cerca de el mar a la puesta de sol, y este restaurante superó TODOS de mis expectativas. Los camareros fueron excelente, y las vistas y atmósfera de le restaurante eran increíbles. El restaurante es más lejos de la Puerta y el centro histórico de Málaga (45 minutos caminando, o 15 minutos de autobús local) lo que lo hace deliciosamente libre de los multitudes de turistas en el centro. ¡Me encanta este lugar, y no puede esperar a volver!

Impresionantes vistas a la bahía de Málaga, un lugar con cierto encanto...el ambiente era muy bueno, la comida realmente rica...cenamos una ensalada de ahumados, boquerones en vinagre (espectaculares) parrillada de verdura y almejas de Málaga...tmb disponen de pan sin gluten y carta con alérgenos...la única pega la lentitud, falta de atención del personal y la cara que ponían al pedir repetidamente las cosas q no llegaban a la mesa... Volveré y lo recomiendo...xq merecen la pena las vistas, el entorno y la comida q estaba de 10

Semplicemente espetacular 👏🏻 el ambiente de 10 la comida de 10 el servicio de 💯 también esagerato el servicio casi te quitan el plato de las manos, pero la verdad una experiencia muy muy buena repetiré seguramente!!! Ahh felicidades para la camarera jovencita rubia más q guapa sabe hacer su trabajo a la perfección 👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻

Excelente terraza con vistas a la bahía de Málaga. Fuimos a tomar unas copas y a disfrutar del atardecer. El lugar es precioso, sin embargo, estaba muy concurrido y el servicio era un poco caótico. Nos movieron por diferentes mesas, nos cambiaron de piso y tuvimos que pedir varias veces para que nos atendieran. Además, trajeron bastantes productos equivocados. Aún así, solucionaron todo y disfrutamos de un buen rato de relax. Muchas gracias.