El Percaler

Una bodega de buen gusto. La mezcla perfecta entre las recetas tradicionales valencianas presentadas de manera moderna. Todos los platos están elaborados a base de productos de mercado. Además, los camareros son muy atentos y cercanos. En general, salimos encantados de cenar en esta bodega familiar por la calidad, el trato y el buen precio.

El servicio es excelente, sensación de estar en familia, fácil aparcar en diferentes descampados de alrededor, las tapas, cada una de las que he disfrutado dan la sensación de estar hechas con mucho mimo, buena carta de vinos, lugar acogedor, y por lo visto en la carta, creo que vamos a repetir y recomendar. Da gusto encontrar lugares donde disfrutar comiendo a un precio mas que competitivo! Gracias a todo el equipo, mantened este ritmo por que aqui hay mucho nivel! 😊

Hacía mucho tiempo que no veía este restaurante a un paso de mi casa…Y finalmente fuimos un viernes a comer a las 14h30 ¡Qué gran descubrimiento! Buena acogida, excelente servicio a su propio ritmo y muy buena comida y vino 👌 El restaurante es « cosy » y muy bien decorado. El único inconveniente es que está demasiado cerca de mi casa 😂

Hemos ido 4 personas ha hacernos unas tapas, en las tapas entraba una caña pero hemos pedido 3 copas de vino blanco y una clara, nos ham cobrado lo mismo que si fueran cañas , la camarera de 10, el sitio nos parecía muy oscuro a primera vista pero nos ha encantado, por supuesto que volveremos ¡¡ pero a comer o cenar!!!!

Hemos ido 4 personas ha hacernos unas tapas, en las tapas entraba una caña pero hemos pedido 3 copas de vino blanco y una clara, nos ham cobrado lo mismo que si fueran cañas , la camarera de 10, el sitio nos parecía muy oscuro a primera vista pero nos ha encantado, por supuesto que volveremos ¡¡ pero a comer o cenar!!!!

Fuimos a cenar. Reencuentro de 5 amigas. Todo estaba bueno. Probamos ensaladilla de la iaia con algunos piquitos, escasos, hummus de garbanzos y pimientos con algunos nachos acompañando, patatas percaleras con salsa alioli y otra salsa que no picaba, torreznos, alcachofas con huevo poché al centro y aceite de trufa (preguntamos y no eran frescas porque aún no es temporada) y unos montaditos de bacalao con ajoarriero y gamba. De postre pedimos tarta de queso y brownie con helado de turrón, muy buenos ambos. Tapas normalitas, no grandes, tirando a justas. Precio algo carete algunas cosas. El camarero que nos atendió muy amable y atento. Pasamos un buen rato. Cenamos en terraza y pudimos alargar bastante, casi hasta el cierre, porque tuvimos suerte y no tenían muchas reservas en terraza en el segundo turno. Tenemos entendido que la bodega abrió este año, una amiga vive por la zona. Del vino no podemos opinar porque pedimos cervezas y refrescos. Zona de aparcamiento 🅿️ gratuito buena, hay un descampado grande justo enfrente.